Verdes Entonces Seran

Parece que Iberdrola se ha decidido. Como buen patrocinador (uno de los más grandes que ha tenido España) asume sus compromisos y patrocinará el Transpac 52 y el Grand Prix 42, que el Desafío Español va a poner en el agua para competir durante la temporada en espera que suizos y americanos dejen ya de tocar las pelotas al personal.
La base española, en la dársena Juan Carlos I, se ha quedado vacía. De momento, todos a la calle exceptuando algunos empleados de mantenimiento, otros pocos de oficinas capitaneados por Maca y los que están contruyendo el TP 52 diseñado por Vrolijk.
Los tripulantes, incluido Paul Cayard, de vacaciones forzosas y con rebajas en los contratos, unos al 50 y otros al 30 por ciento, a la espera de que se formen los dos equipos que participarán en los circuitos de cada clase.
Es de suponer, y estoy casi seguro, que si Iberdrola patrocina a estos dos barcos, Quebramar lo hará también, aunque sea en menor medida. El TP 52 es de nueva construcción, pero el GP 42 será el que tantos éxitos le dio la pasada temporada a Quebramar Chrysler de la mano de Laureano Wizner.
Ahora queda deshojar la margarita y porfiar por el club por el que van a navegar ambos barcos. El Club Náutico Español, que tan "espléndidamente" preside Manolo Chirivella está "desahuciado" y no pondrá su grímpola en la popa de ninguno de los dos barcos. Las apuestas se van centralizando y tienen todas las papeletas el Marítimo del Abra, de Bilbao, sede principal de Iberdrola junto al Real Club Náutico de Valencia, al que Zulueta se ha acercado después de despreciarle repetidas veces. Los socios tienen la palabra.